
NUESTRA FILOSOFÍA
Greenway Crossing Montessori School es un entorno educativo privado donde los maestros certificados Montessori planifican una experiencia de aprendizaje individual apropiada para el nivel de desarrollo de cada niño.
Los padres participan activamente en la educación de sus hijos y en muchos aspectos de nuestra comunidad escolar. Creemos que cuando los padres demuestran su compromiso con la educación infantil, tanto los niños como la escuela se benefician.
Los estudiantes aprenden a considerarse miembros activos de una comunidad global diversa. Respetamos y valoramos las diferencias y acogemos con satisfacción la rica diversidad de clases económicas y sociales, herencias raciales y étnicas, creencias religiosas y espirituales, capacidades físicas y estructuras familiares en el aula. Nos tratamos con honestidad y respeto mutuo. Para fomentar una perspectiva global, nuestro currículo incluye otros idiomas, geografía y educación multicultural.
Las aulas están equipadas con materiales de aprendizaje práctico y exploratorio de alta calidad. Las áreas de aprendizaje incluyen habilidades de la vida real y preparación de alimentos, desarrollo sensorial, arte centrado en el niño, exploración científica, música y movimiento corporal, actividades de otros idiomas, geografía y materiales multiculturales, lengua, preescritura y escritura, y prematemáticas y matemáticas. Fomentamos la autoestima, la independencia, la autodisciplina, la cooperación, la resolución de problemas y el amor por el aprendizaje.

NUESTRA MISIÓN
Proporcionar un entorno cuidadosamente preparado, basado en la filosofía educativa Montessori, donde los niños puedan participar activamente y alcanzar su máximo potencial. Nuestra misión principal es fomentar y apoyar el desarrollo integral del potencial de cada niño, proporcionando un entorno cuidadosamente preparado, basado en la filosofía educativa Montessori.
CONOZCA A NUESTRO FUNDADOR
Cynthia Walker
Ella creía en los principios Montessori: una visión de poblaciones diversas que aprenden de las experiencias de los demás y que todos los niños merecen la oportunidad de aprender.
Así que se mudó a Madison y trabajó en algunas escuelas Montessori locales, pero no encontró que cumplieran su deseo de impartir los principios Montessori a una población diversa. En 2003, se le presentó la oportunidad de influir positivamente en la educación de nuestros niños y la aprovechó.
